Hoy celebramos la fiesta de la Natividad de la Virgen María.
Antífona de entrada: “Celebremos con alegría el Nacimiento de María, la virgen: de ella salió el sol de justicia, Cristo, nuestro Dios”.
Estamos en una encrucijada del camino, dentro de la campaña de la Visitación que finalizará el próximo día 7 de octubre, fiesta de la Virgen del Rosario.
Quizás convenga recordar los pasos que hay que dar en este rato de oración para que me identifique con los sentimientos del corazón de Cristo por medio de María, en el día de su Natividad:
- Hago silencio para ponerme en la presencia de Dios.
- Le pido luz y fuerza al Espíritu Santo
- Leo con sosiego los textos que hoy me propone la Iglesia.
En este día te traigo a la memoria algunos textos del P. Morales sacados de las “Semblanzas” para este día. Espero te acerquen a los sentimientos del Corazón de María en este día.
“Alegría, confianza, ofrecimiento. Tres sentimientos nos empapan. Tres sentimientos que llenan de amor el alma de un creyente al contemplar el nacimiento de María, fiesta de familia… Hay que acercarse a felicitarla, y… a felicitarnos todos con ella. Es día de regocijo íntimo…”. “Virgen Madre de Dios, tu Natividad es anuncio de gozo para el universo mundo”. Alegría ecuménica, universal. Gozo para la tierra. Nuestra redención alborea. Pronto nacerá el Salvador. Clarea el día. Ha pasado la noche del pecado. Amanece… Una virgen nace con promesa infalible de redención y vida para el mundo…
“Con la alegría se entrelaza la confianza. Con ingente regocijo celebremos el Nacimiento de María, para que interceda por nosotros ante Jesucristo. Ella, pura, íntegra, inmaculada, arrebata de Dios todo para nosotros. Es la “omnipotencia suplicante”… Ella rogará y nos convertirá al Amor. Viviremos cara a Dios, y Él iluminará singladuras del rudo peregrinar de cada día bajo el sol abrasador hasta que “alboree el día y el lucero de la mañana despunte en vuestros corazones” (2 Pe 1, 19).
Petición: Santa María en el día de tu Natividad concédenos fe creciente, esperanza cierta alegría desbordante, paz imperturbable, amor ardiente.
