Última semana de cuaresma… surgen preguntas ¿la he vivido bien?, deseos, los de vivir una Pascua con intensidad, y proyectos ¿dónde lo viviré mejor?
- A la primera pregunta ¿he vivido bien la cuaresma? nos vale con acogernos a la gracia y misericordia de Dios y acelerar el paso estos días.
- A los deseos únicamente hay que darles forma y ponerlos por obra, quizás una confesión en estos días nos ponga a tono.
- Y donde vivir mejor la Pascua tenemos que saber que son los días más importantes del año para el cristiano y que es el momento de vivirlo en tu parroquia, en tu comunidad cristiana, participando con generosidad.
No cabe otra opción.
Las lecturas de hoy nos ayudan a ponernos ante estas opciones fuertes y a tomar decisiones. Porque siempre tendremos otras opciones que nos atraen más, que se nos presentan y parece imposible decir que no. Lee con calma la primera lectura en la que el rey Nabucodonosor propone a tres jóvenes no seguir la ley de Dios, con amenazas, torturas, provocaciones. ¡Vaya ejemplo a seguir!
Hoy a los jóvenes se os presenta así la vida (aunque no es de hoy, es de siempre): modelos únicos a los que seguir, placeres para disfrutar, estilos de vida fáciles. Y ante ellos un joven cristiano tiene que tener una actitud valiente, generosa y decidida: ¡Majestad, el Dios al que adoramos puede librarnos del horno encendido y nos librará de tus manos! Piensa en esta respuesta de los tres jóvenes y mira tu vida de cada día, en lo pequeño: ante el estudio, ¿doy todo lo que debo? Ante las diversiones y el tiempo libre ¿soy ejemplo de integridad? En la amistad ¿me comporto como cristiano?; en la oración ¿confío así en Dios? Y así otras tantas cosas.
La lectura nos lleva directamente el evangelio. Se trata de una opción de libertad ante la esclavitud. Se trata de una amistad, con Jesucristo. De una decisión, por Jesucristo. De un sí, a Jesucristo.
“Si os mantenéis en mi Palabra seréis de verdad mis discípulos,
Conoceréis la verdad
Y la verdad os hará libres”
