1. Oración
preparatoria: hacemos la señal de la cruz y nos ponemos en la
presencia de Dios. Invocamos la ayuda del Espíritu Santo y rezamos mentalmente
la oración preparatoria de Ejercicios (EE 46): “Señor, que todas
mis intenciones, acciones y operaciones sean puramente ordenadas en servicio y
alabanza de tu divina majestad.”
2. Petición. Pedimos
al Señor, como el leproso del evangelio del domingo pasado: “si
quieres, puedes limpiarme” (Mc 1, 40). Y pedimos por la conversión de
nuestro corazón en el camino de la Cuaresma y por la conversión de los que
están a nuestro alrededor.
3. Puntos para orar: mañana, 14
de febrero, Miércoles de Ceniza, empezamos la Cuaresma. El Papa nos ha escrito
un esperanzador mensaje para esta Cuaresma 2018. En él, entre otras varias
cosas nos dice: “Invito especialmente a los miembros de la Iglesia a
emprender con celo el camino de la Cuaresma, sostenidos por la limosna, el
ayuno y la oración. Si en muchos corazones a veces da la impresión de que la
caridad se ha apagado, en el corazón de Dios no se apaga. Él siempre nos da una
nueva oportunidad para que podamos empezar a amar de nuevo. Una
ocasión propicia será la iniciativa «24 horas para el Señor», que este año nos
invita nuevamente a celebrar el Sacramento de la Reconciliación en un contexto
de adoración eucarística. En el 2018 tendrá lugar el viernes 9 y el sábado 10
de marzo, inspirándose en las palabras del Salmo 130,4: «De ti procede el
perdón». En cada diócesis, al menos una iglesia permanecerá abierta durante 24
horas seguidas, para permitir la oración de adoración y la confesión
sacramental. En la noche de Pascua reviviremos el sugestivo rito de encender el
cirio pascual: la luz que proviene del «fuego nuevo» poco a poco disipará la
oscuridad e iluminará la asamblea litúrgica. «Que la luz de Cristo, resucitado
y glorioso, disipe las tinieblas de nuestro corazón y de nuestro espíritu»,
para que todos podamos vivir la misma experiencia de los discípulos de Emaús: después
de escuchar la Palabra del Señor y de alimentarnos con el Pan eucarístico
nuestro corazón volverá a arder de fe, esperanza y caridad.”
La preparación de los puntos de hoy puede ser un buen momento para leer
completo este mensaje con calma y con él preparar nuestro corazón para vivir lo
mejor posible este tiempo de gracia que es la Cuaresma.
5. Podemos
descargar el mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2018 en los enlaces
siguiente:
6. Unos
minutos antes del final de la oración: Diálogo con la Virgen. Avemaría
o Salve.
7. Examen
de la oración: ver cómo me ha ido en el rato de oración. Recordar si
he recibido alguna idea o sentimiento que debo conservar y volver sobre él. Ver
dónde he sentido más el consuelo del Señor o dónde me ha costado más. Hacer
examen de las negligencias al preparar o al hacer la oración, pedir perdón y
proponerme algo concreto para enmendarlo.