¿Con qué frase del relato de la Pasión
te vas a quedar este año? Yo te invito a que cuando la leas o la oigas en la
celebración de la Eucaristía, te dejes influir por el Espíritu Santo. Habrá un
momento en que una frase te haga resonar tantas cosas que sabrás que esa es la
frase a meditar.
Esa frase ahora es nada más que un
conjunto de letras sobre un papel, pero esas letras responden a la vivencia de
Jesús de Nazaret, ese hombre hermoso, bueno y verdadero, que es llevado a la
muerte y la destrucción humana, porque el mundo no fue capaz de soportar la
Verdad. El propio Pilatos así se lo manifestó: “¿Qué es la verdad?”, ¡cuando la
tenía delante de sus narices! Y, ya que estamos, se diría Pilatos, voy a
estropear la belleza de este hombre bueno (“no he encontrado en él ninguna
culpa”), y lo voy a destrozar a latigazos.
Lo que no sabía el gobernador romano es
que esos hechos malvados iban a resaltar aún más las virtudes de ese hombre.
Con la muerte y resurrección de Jesús, se iba a obrar el mayor y más bello acto
de amor de la humanidad entera e iba a servir para despejar toda duda sobre la
naturaleza del propio Jesús, sí era también Dios, puesto que se resucita a sí
mismo.
Hoy es día de ramos y de hosanas, nos
encanta podérselo cantar a Nuestro Señor Jesucristo, pero no es una fiesta
plena, todos sabemos que es solo un pórtico entusiasta a una terrible pasión.
Por eso estamos alegres, pero contenidos. Se masca la tensión en el ambiente,
hay algo en el aire que se hace irrespirable. De fondo se está maquinando una
traición. En el corazón de muchos hay odio y rencor porque les ha contrastado
su mala vida con la buena fe. Pero en otros muchos corazones, “toda la muchedumbre, que había concurrido a este espectáculo, al ver las
cosas que habían ocurrido, se volvía dándose golpes de pecho”.
¡Cuánta gente buena, aunque sin poder
para cortar esta oleada de mal! El demonio acaba de perpetrar su mayor crimen,
está en su apogeo de dominio de las tinieblas sobre la luz… Pero solo le durará
3 días, porque al tercer día ese muerto resucitará con poder para acabar con el
diablo.
Apúntate la frase que el Espíritu te
haya sugerido, en una hojita, en tu móvil, en la pantalla del ordenador…
Repítela varias veces al día.
