11 marzo 2021, jueves de la 3ª semana de Cuaresma. Puntos de oración

“Escuchad mi voz, Yo seré vuestro Dios y vosotros seréis mi pueblo. Seguid el camino que os señalo, y todo os irá bien”.

Así empiezas hoy a hablarme. Con una promesa. Sólo tengo que escucharte y ya me dices cuánto me quieres, ¡¡me eliges como pueblo tuyo!! ¡¡Cómo no me va a ir bien!!

Y así empiezo yo casi todos los días: “Pero no escucharon ni hicieron caso. Al contrario, caminaron según sus ideas, según la maldad de su obstinado corazón. Me dieron la espalda y no la cara.”

Me levanto con sueño y con prisas, se me olvida ofrecerte el día. Para cuando me doy cuenta ya corro hacia el Metro, el bus o con el coche y por supuesto empieza la queja porque hay gente por todas partes con prisas igual que yo…

¡Escucharte!, me pides que te escuche, que siga tu camino y que me irá bien. Pero yo me obstino en mi camino… y así me va.

Pero cuando me paro y te escucho, cuando arrancas ese demonio que me atormenta, de mis prisas y mis cosas, cuando estoy contigo dejo de desparramar.

Estar contigo es dejar de mirarme y escucharte, estar contigo es seguir el camino que señalas y que todo vaya bien, estar contigo es dejar de estar mudo y hablar en servicio tuyo por y para los demás. Estar contigo…

Quiero darme cuenta de tu presencia. Siempre estás a mi lado y yo me lo pierdo porque no me paro a escucharte.

Madre, ayúdame hoy a pararme y escucharle como sólo tú sabes hacerlo.

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