2 octubre 2013. Miércoles de la XXVI semana de Tiempo Ordinario – Puntos de oración

         A veces no puedo por menos de pensar, que Jesucristo tiene más admiradores que seguidores. ¿Estaré en lo cierto...? ¿Será verdad...? ¿O es pura imaginación mía...?
            Todo el mundo sabe lo que es un admirador... ¿quién no los ha tenido alguna vez...? Pero no todos conocemos los límites de la admiración... Me vais a permitir que os los muestre, con una breve y sencilla narración imaginaria...

***

            Se cuenta que sobre un cañón  profundo, tendieron un cable de acero de 70 metros, y un valeroso acróbata atravesó el cañón caminando sobre el cable que se balanceaba..., siendo calurosamente aplaudido por la multitud que lo contemplaba...
            Volvió a atravesarlo, pero con los ojos vendados... La multitud le aplaudió con más entusiasmo aún...
            Por último cruzó una vez más el cañón empujando una carretilla llena de arena, mientras el cable cedía casi a punto de ruptura... En cuanto sus pies pisaron tierra firme, el público, antes aterrado, lo aclamó con locura...
            ¡Usted puede hacer cualquier cosa sobre el cable…! Le dijo un joven, que lo contemplaba... ¡No he conocido otro mejor que Ud...!
            El acróbata se puso a vaciar la arena de la carretilla...
            Entonces.., ¿confías en mi habilidad...? Le dijo el acróbata al joven...
            ¡Totalmente...! Respondió el joven... ¡Es Ud. lo mejor que he visto en toda mi vida sobre un cable...!
            Muy bien, dijo el acróbata... Volveré a cruzar de nuevo una vez más el cañón.., pero en esta ocasión llevándote a ti en la carretilla...
            ¡De repente y en un instante..., aquel joven entusiasta perdió toda su confianza...!

***

            ¡Mis queridos amigos…! ¿Veis ahora la diferencia entre la admiración y el seguimiento...?
            Todos admiramos a Jesucristo..., pero cuando nos llama y nos invita a seguirle de cerca..., porque quiere repetir en nosotros su vida..., su pasión…, y su muerte..., entonces perdemos toda nuestra confianza en El... ¡Y es que Jesucristo tiene muchos admiradores.., pero muy pocos seguidores..!
            ¿Cuáles serían los rasgos de un seguidor de Jesucristo...?
            Permíteme que te los señale…, y que te invite a que los desarrolles tú, en este rato de oración que estás teniendo...
            Tres, son los rasgos fundamentales, a mi entender, que debe tener todo seguidor del Señor:
·                    Primer rasgo: La seducción... ¿Has sido seducido por Cristo...?
·                    Segundo rasgo: La misma misión... ¿Es ese tu apostolado...?
·                    Tercer rasgo: El mismo destino... ¿Será ese tu final...?


            Ahora desarrolla tú mismo estos tres puntos de oración, y deja que Dios te hable...

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