Hoy
celebramos una gran fiesta mariana, Nuestra Señora del Rosario. Releyendo sobre
esta festividad, me doy cuenta que el 7 de Octubre de 1571 Occidente fue
liberado de la amenaza turca por la victoria de Lepanto, que se atribuye al
rezo del Rosario.
Lo traigo a colación porque cuantas victorias nos
proporciona a nosotros militantes el rezo del rosario. La primera es su rezo
diario. Distraídos, quizás, en medio de la calle, a veces a medias, a
prisa…Pero a diario trayendo en medio del mundo la intercesión de la Virgen.
Algo tan sencillo como el rezo repetido del Ave María, cuanta eficacia en
nuestras vidas tiene. El que se acoge a María no se ve abandonado, persevera y
es apóstol.
Hoy tras ponernos en la presencia de Jesús, hacer la
oración junto a María. Repetir muchas veces su nombre, pedirla que ruegue por
nuestras necesidades, por nuestras debilidades, por nuestras ilusiones. Pedirla
que su Hijo nos llene de gracia, ella que es la medianera. Que no nos deje caer
en las tentaciones, que nos haga conscientes de por donde se nos cuela el
demonio. Donde ella está o cuando se la invoca el demonio se esfuma. Hoy más
que nunca el demonio intenta separar a sus militantes de la milicia, de
cumplir sus compromisos. Cuánto cuesta ser fieles a ellos. Pedirla ella que es
la fiel esclava del Señor. Esa fidelidad es la que nos permite ser libres.
El evangelio va al unísono con la fiesta que celebramos.
Jesús nos indica como orar, a través del Padrenuestro. A diario lo hacemos en
el rezo del Rosario. Repetirlo en la oración y durante el día. Santificar las
realidades con nuestro trabajo, haciendo la voluntad de Dios en cada momento,
extender su reino a través de nuestras obras y acciones. Hoy la fe en
Europa, España está más amenazada que en el siglo XVI, como recordábamos al
principio. Podemos quizá volver a rezar el Rosario con más fervor. Somos
militante de la Virgen, que ella nos infunda un amor grande a Jesús que culmine
en que llegue a las almas. Hoy tiene que ser un día grande y especial para
todos nosotros los militantes.