Hoy el Evangelio nos cuenta que Jesús
negó a los fariseos la petición de un signo del cielo. Es una escena extraña
porque la vida pública de Jesús está llena de signos. Todos los milagros de
Jesús lo son, ya que todos quieren mostrar que Dios está con Él y que Él es el
Hijo de Dios. De los más claros es la curación del paralítico, puesto que Jesús
le libra de su parálisis para mostrar que Él tiene el poder de perdonar los
pecados. También queda claro cuando Jesús dice que no puede hacer
milagros -echar
demonios- con el poder de Satanás porque
entonces Satanás se estaría haciendo la guerra a sí mismo. Entonces, si Jesús
está haciendo milagros siempre, ¿por qué se niega en esta ocasión? ¿Qué se
oculta en el corazón de Jesús?
Una respuesta fácil es que les reprocha
a los fariseos su ceguera. ¿Qué diferencia hay entre los signos que Jesús ya
está haciendo y el signo que le piden? Eso es cierto, pero quisiera fijarme en
otra cosa que nos puede estar diciendo Jesús. Los signos son un regalo, no algo
que se exige o que se pide como prueba. Cada milagro de Jesús no es solo un
regalo para la persona curada. Es un regalo para todos los hombres porque en él
se muestra que Jesús es Dios. Y saber eso es un regalo. No lo merecemos. Nos lo
da Dios porque Él quiere. Porque Él ha venido a buscarnos hace milagros. Tan
regalo son la Encarnación, la Cruz y la Resurrección como el más pequeño de los
milagros. Jesús nos invita a acercarnos a Él siempre con actitud agradecida,
reconociendo que Él ya ha actuado antes de nuestro interés por Él y de manera
gratuita. Veamos esto en la mirada airada de Jesús a los fariseos. Es un mensaje:
mi amor es gratis, no se exige.
La lectura del Génesis refuerza ese
mensaje. A pesar de que Caín ha hecho algo horrible. A pesar de que el Señor le
había advertido de la tentación para que la evitara. A pesar de todo eso, el
Señor quiere proteger la vida de Caín. Aunque él se vea como un desgraciado
alejado totalmente de Dios, Dios no se aleja de él. Caín no lo merece, pero
Dios da todo. Y lo da gratis.
¿Y a ti qué te está dando gratis Dios? ¿Qué te dice la mirada airada de
Jesús? ¿Hacia qué regalo que te está dando quiere dirigir tu mirada?