25 febrero 2019. Lunes de la VII semana del Tiempo Ordinario – Puntos de oración

El Evangelio de hoy nos habla sobre nuestra fe en Cristo, las posibles actitudes ante esta falta de fe y cómo poder recobrarla.
En este texto se pueden destacar varias ideas:
- Los discípulos, aquellos que conocen a Jesús y que han expulsado demonios antes, no han sido capaces de expulsar el demonio del niño.
Nosotros los cristianos, que hemos experimentado la vivencia de Cristo en nosotros, podemos dejar de ser testigos de Jesús para ser únicamente nuestros propios testigos. Deja que sea Jesús quien llegue a los corazones de aquellos que te rodean, no busques solo tus buenas acciones.
- La falta de fe de los discípulos hace que la gente empiece a dudar también de su Maestro. “Si algo puedes ten compasión de nosotros y ayúdanos”.
Nuestra falta de fe puede afectar la fe en los demás. “La fe es un regalo de Dios a quienes lo aman” (1ª lectura) Ama y confía en Jesús, y esa confianza y amor llegará también a quienes te rodean.
- El pasaje del Evangelio de hoy nos presenta dos posturas ante nuestra falta de fe:
o Una actitud de confianza única en nosotros mismos. “¿Por qué no pudimos echarlo nosotros?”
o Una actitud humilde, que reconoce la falta de fe y pide ayuda a Jesús. “Creo, pero ayuda mi falta de fe”
Jesús quiere hacer obras grandes en nosotros, pero solo es posible desde la fe. La fe en Jesús nos lleva a actuar en su nombre, no en el nuestro; nos lleva a reconocer que estamos necesitados de Jesús y que, aun siendo nuestra fe pequeña, Él puede obrar el milagro en nosotros. 
- Jesús no solo les está contando como se puede expulsar a una especie de demonio, sino el remedio para su falta de fe: La oración.
Jesús nos muestra el camino de la fe: la oración. La oración por si sola es un acto de fe, que nos conduce a amar más a Jesús y a nuestro prójimo. La oración es el cimiento de la comunión de los santos, desde la que es posible la intercesión de unos por los otros. Pide por aquellos que Dios ha puesto y pone en tu vida, serás testigo del poder de la oración en tu vida.

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