"Volvieron a los suyos". Pedro
y Juan sienten la necesidad de volver junto a aquellos con los que han
experimentado la resurrección de Jesucristo.
Volver a los suyos es volver a sentir
que Jesús está más vivo que nunca al poder compartir con los demás las
grandezas que Jesús obra en sus vidas.
Volver a los suyos representa mucho más
que volver a casa, es volver renovados de la tribulación, de la prueba; es
sentirse en las manos de Dios
que nos acompaña en nuestro caminar por
este mundo hasta nuestro regreso a casa. Es ser testigos del amor de Dios en
momentos donde la luz parece apagarse. Es dar esperanza a aquellos que no
encuentran sentido a una fe perseguida y rechaza por tantos.
Emprendamos, de la mano de nuestra madre
la Virgen, el camino a los nuestros; llevando con nosotros la alegría de Jesús
resucitado.