Desde que comenzamos a tener uso de razón nos asaltan las preguntas, y utilizamos las preguntas, como una primera forma de relación con los demás... Todos nosotros sabemos distinguir, la información, o el nivel cultural que tiene una persona, por las preguntas que nos hace. Y es que las preguntas nos delatan, lo queramos o no lo queramos...
Hoy vemos, en el evangelio de este día, como ante una pregunta de los discípulos, Jesucristo responde con una enseñanza y no solo con una respuesta informativa... El Señor irá más allá de lo que se le pregunta, e intentará aprovechar la ocasión para formar debidamente a sus discípulos.
La pregunta en cuestión fue: -«¿Quién es el más importante en el reino. de los cielos?
Jesús utilizará la imagen de un niño para plasmar su respuesta. "Si no volvéis a ser como niños no entraréis en el reino de los cielos..." Y además lo afirma categóricamente, diciendo: "O lo aseguro..."
¿Que representa la imagen de un niño, y qué relación puede tener con el Reino de los Cielos? Dos preguntas que nos podemos hacer al comenzar nuestra oración.
Cuentan que: "Un famoso artista, pero insatisfecho, caminaba por la ciudad buscando un nuevo motivo para su pintura, que debería ser la obra-maestra de su vida. Se encontró con un sacerdote y le preguntó: ¿Qué es lo más bello del mundo? Lo más bello del mundo es la Fe. Nuestra fe en Dios que ilumina toda nuestra vida. Nuestra fe en la vida, que es el regalo más precioso que hemos recibido. La fe realiza milagros y hace obras-maestras. La fe es el sol de nuestra vida."
Más adelante se encontró con un obrero y le preguntó: ¿Qué es lo más bello del mundo? Para mí lo más bello del mundo es la esperanza. La esperanza de ganar mañana un salario mejor, de vivir una vida digna, de poder promocionarme...
Más adelante vio a una niña en el banco de un jardín, a la que su padre y su madre abrazaban y preguntó: Para ustedes ¿qué es lo más bello del mundo? Y respondieron: Para nosotros lo más bello del mundo es nuestro amor, nuestro sueño hecho visible en el rostro de nuestra hija. Ella es nuestro aliciente para vivir, nuestra alegría y nuestra felicidad..."
S. Pablo en su primera carta a los Corintios capítulo 13, versículo 13 nos dirá: "Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor."
Nadie como el niño puede sintetizar en sí mismo el concepto del amor y lo que este representa, Dios y su Reino:
1. Un niño es seguridad: "Para el niño sus padres están en todas partes: al frente, atrás, encima, al lado y abajo, aquí y ahora..."
2. Un niño es confianza: "Nace con un sentimiento básico de confianza. Su vida es un acto único de Fe. Por eso no duda. Acepta cualquier cosa como verdad. Confía incondicionalmente en la ternura de la madre, en los brazos del padre; confía en la belleza de la vida, en el misterio del amor."
3. Un niño es abandono: "Abandonarse plenamente en las manos de quien nos ama, ése es el secreto de los niños, ése es el secreto de nuestra felicidad."
Termino esta reflexión con una narración imaginaria:
"Un matrimonio decide salir por la noche.., y esperan a que su hija se quede profundamente dormida para hacerlo... En ese lapsus de tiempo en que se encuentran fuera de casa, un desaprensivo logra entrar por una de las ventanas, precisamente donde la niña descansa. Ella despierta con el ruido y pregunta en su inocencia:
- ¿Qué estás haciendo aquí?
- Vine a buscar el dinero de tus padres. Si no me enseñas donde lo guardan te llevaré
- conmigo...
- No podrás hacerlo, responde la niña, porque mi Ángel de la Guarda no te lo permitirá.
- ¿Dónde está tu ángel?
- Míralo, en la cabecera de mi cama.
- El ladrón se emociona al contemplar el hermoso cuadro del Ángel de la Guarda y dice:
- El cuadro es muy bonito. Reza por mí. -y se marchó..."
Y es que el secreto de la seguridad interior es la confianza..."Si no volvéis a ser como niños nos entraremos en el Reino de los Cielos…