9 febrero 2022, miércoles de la 5ª semana de Tiempo Ordinario. Puntos de oración

La palabra de Dios en este día vuelve sobre el corazón como nuestro centro más íntimo donde se fragua la verdad de nuestra vida. Ayer Jesús nos avisaba de que podemos honrarle con los labios pero tener el corazón lejos de Él. Hoy nos invita a purificar el corazón, pues “del corazón del hombre salen los pensamientos perversos”. En una homilía el Papa Francisco comparaba el corazón con un mercadillo de barrio en el que hay de todo y por eso hay que estar vigilantes para discernir cuanto bulle dentro de nosotros y apostar por todo lo bello, bueno y verdadero que el Espíritu siembra en el corazón.

Los padres del desierto tenían un método para cribar los pensamientos y es obligarles a declarar su origen: ¿eres de los nuestros o vienes del enemigo? Muchos engaños se deshacen al sentirse descubiertos. Haz la prueba. 

El salmo responsorial lo dice de modo positivo hablando de la sabiduría del justo: “lleva en el corazón la ley de su Dios y sus pasos no vacilan”. Como el arca de la Alianza guardaba las dos tablas de los diez mandamientos dados por Dios a Moisés, mi corazón ha de guardar esas dos tablas de la ley de Dios que son el amor a Dios y al prójimo. Así, de la bondad del corazón hablarán las palabras de los labios y las obras de las manos en este día. En este sentido puedo pedir con esta bella oración de la Iglesia: “Señor, Dios todopoderoso, que nos has hecho llegar al comienzo de este día: danos tu ayuda para que no caigamos hoy en el pecado, sino que nuestras palabras, pensamientos y acciones sigan el camino de tus mandatos”. 

Archivo del blog