Comenzamos el día dando gracias al Padre, deseando identificarnos con el Hijo y dejándonos invadir por el Espíritu.
Dios quiere hablar contigo hoy, tiene una misión para ti, una vocación
dentro de tu vocación ¿Qué quieres de mi Señor?
Para poder responder a esta pregunta con nuestra vida hoy el Señor nos
presenta a San José, un hombre justo. Siempre me ha dado mucha devoción que
Dios le hablara en sueños (llevo muy bien eso de dormir) pero pensándolo bien,
qué fe tan grande la del justo José. De un sueño hace un cambio radical de toda
su vida, contra toda evidencia, sin preguntas, rápidamente.
Hay una invitación a la confianza. Señor no necesito más pruebas de tu
Amor, quizás simplemente tener buena memoria. Dame la fuerza para seguir tu
llamada en el día de hoy, para cumplir en todo tu Voluntad.
San José, enséñame a ser santo en lo escondido, a amar con locura a María y a Jesús.